Te haz puesto a pensar?

Borregos sin ideas propias, sin anhelos propios, sin vida propia.
Si como leíste bien. Borregos.
Suena terrible, pero eso es en lo que nos hemos convertido, en personas sin personalidad, que van tras lo que la sociedad les ha metido en la cabeza por siglos.
Un día fui un borrego, bueno aún me quedan rastros, pero al menos lo acepto. Iba por la vida creyendo que era diferente, especial y lo que realmente era una más de los borregos.
Piensa por un momento: ¿Estudiaste realmente la profesión que soñabas? ¿Trabajas en lo que realmente quieres?. Un filosofo oriental dijo un día hay muchos abogados frustrados porque querían ser mecánicos y muchos mecánicos frustrados porque querían ser abogados.
La sociedad nos ha dicho: Se exitoso. Y entendemos como exitoso que tengamos un empleo estresante, que nos acapare más de 10 horas diarias, donde tenemos que luchar, ponernos bravos, que nos de un ataque cardíaco. Y mantener una casa elengantísima, posar como si fueras de mentira, sonreír con clase y caminar con elegancia premeditada, ser un disfraz. Y cuidado si no tienes el auto ultimo modelo que sale en comerciales que te hace sentir que si lo compras te parecerás a la modelo que lo conduce.
Claro que necesitamos una casa, un auto, dinero y estabilidad. Eso está bien, no estoy en contra de superarte, darte tus lujos, disfrutar tu dinero. ADELANTE!!!!
Lo que no me cuadra en toda esta historia es que cuan caro pagamos para tener todo eso, pagamos con nuestra vida, pagamos con ser borregos que van a las mismas fiestas porque eso es cool, se peinan de una manera porque los hace diferentes, se visten para agradar, actúan para ser aceptados, pertenecen a una religión porque nacieron en ella y eso es lo que les enseñaron.
Y nos perdemos la vida, el riesgo, el experimentar lo maravilloso de sentirse realmente vivo.
Al amor también lo encarcelaron, lo volvieron esclavitud, lo encerraron entre el “deberías”, “eres mío” y “no puedo darte todo mi corazón porque puedes herirme”.
Y dejamos de experimentar el amor por dejarnos llevar por eso:
Deberías:
- Estar todo el tiempo conmigo.
- Pensar como yo.
- Ser mi centro y yo tu centro.
- Darme un abrazo
- Amarme
- Ser mejor
- Dejar de ser egoísta
Deberías, deberías, deberías, Bla, Bla, Bla. Y algo tan espontáneo y hermoso como darse, amar y sentirte pleno se convierte en un deber. El abrazo se da por deber, amas por deber (eso no es amor), estas con alguien por deber. ¡Que terrible!!!.
Eres Mío:
- No mires alrededor.
- No hables con nadie.
- No tengas tus propios sueños, sino el de ambos.
- Ya nos casamos, tienes que estar siempre conmigo.
Nadie es de nadie, y mientras mas tratas poseer a quien amas, mas se aparta su alma de ti, solo tendrás su cuerpo.
Puedes herirme:
- No soy vulnerable ante él o ella.
- Te amo pero no te entrego mi corazón.
- Te amo pero mis miedos no te los cuento, puedes usarlos en mi contra.
- Te amo, pero se que me engañas, todos lo hacen.
Y estamos muriendo lentamente. No nos permitimos vivir y experimentar el amor en toda su capacidad. Ser vulnerable, amar completamente, confiar y entregar el alma. Llorar junto a ella, mostrar tu dolor, miedos, tus sueños de niño. ¿Y que importa si luego te hirieron?. Por lo menos te permitiste soñar y vivir al borde del amor, eso es mejor que nunca amar, sentir y arriesgar.
¿Sabes?, hemos sido borregos, y tal vez cueste mucho dejar todo lo que nos han enseñado por tantos años y entrar en nuestro corazón y darnos cuenta de quienes somos y que queremos, pero por lo menos ya estamos despiertos. Eso es el comienzo.